El Ballet Flamenco de Andalucía celebró sus Bodas de Plata en el Teatro de la Maestranza. Han transcurrido 25 años desde aquel 12 de noviembre de 1994 en el que Mario Maya sorprendía a todos con De lo flamenco y Réquiem (ritual laico para el fin del milenio), dos obras a la altura de cualquier compañía de danza del mundo. En un tiempo record el maestro granadino había formado de la nada una compañía estable y había montado una obra sobrecogedora. Anoche pudimos ver apenas un apunte de aquel ambicioso proyecto, que, como suele ocurrir por estas latitudes, los políticos de turno, tan ineptos como pueblerinos, se encargaron de cortar de raíz. Anoche Diego Llori, Cristian Lozano, Mariano Bernal, Rosa Belmonte, Gema Caballero, Julia Acosta, Andrea Antó, Ana Almagro, Lidia Gómez, Gloria del Rosario, Olga Llorente, Macarena Campos, Lucía Fernández, Virginia Laje, Inés Méndez, María Peñuela, Sofía de Utrera, Diego Aguilar, Daniel Cabezuelo, Borja Cortés, Alejandro Fernández, Víctor Martín, Alejandro Molina, Federico Núñez, Alejandro de Manuel y Miguel Ángel Rodríguez revivieron los pasos que Isabel Bayón, Rafaela Carrasco, Beatriz Martín, Belén Maya, Israel Galván, Ángela Chamarín, Alicia Fernández, Marta Fernández, Inmaculada Guerrero, Pilar Martínez, Ana María Moya, Myrian Sánchez, Rosa Zaragoza, Ángel Atienza, Manuel Betanzos, Pedro Blázquez, Raúl Gómez, Ramón Martínez, Valeriano Paños, José Rojas, Juan A. Salguero, Marco Vargas y José L. Vidal dieron en el mismo escenario aquella gozosa ocasión. Lo hicieron también de un modo ejemplar.
Así empezó una celebración que siguió con los tientos-tangos de Flamencos del Altozano (1996) de Manolo Marín, interpretados por Rafael Campallo, y recuerdos del 3er movimiento de “Fantasía del Cante Jondo” de Cosas de payos (1998) de Javier Latorre, La leyenda (2002) de José Antonio, Viaje al sur (2005) de Cristina Hoyos y Ramón Oller, Llanto por Ignacio Sánchez Mejías (2012) de Rubén Olmo y Álvaro Paños, “Rondeña de Ramón Montoya” y “Cantiñas de Juana Vargas La Macarrona” de En la memoria del cante (2014) de Rafaela Carrasco y Con permiso, más (2019) de Úrsula López, actual repetidora de la compañía.
Al cante estuvieron Sebastián Cruz, Vicente Gelo, Antonio Campos, Miguel Ortega y Gema Caballero con las guitarras de Javier Patino, Juanma Torres, Jesús Torres y Juan Antonio Suárez “Cano” y la percusión de Raúl Domínguez “Botella”.
Así empezó una celebración que siguió con los tientos-tangos de Flamencos del Altozano (1996) de Manolo Marín, interpretados por Rafael Campallo, y recuerdos del 3er movimiento de “Fantasía del Cante Jondo” de Cosas de payos (1998) de Javier Latorre, La leyenda (2002) de José Antonio, Viaje al sur (2005) de Cristina Hoyos y Ramón Oller, Llanto por Ignacio Sánchez Mejías (2012) de Rubén Olmo y Álvaro Paños, “Rondeña de Ramón Montoya” y “Cantiñas de Juana Vargas La Macarrona” de En la memoria del cante (2014) de Rafaela Carrasco y Con permiso, más (2019) de Úrsula López, actual repetidora de la compañía.
Al cante estuvieron Sebastián Cruz, Vicente Gelo, Antonio Campos, Miguel Ortega y Gema Caballero con las guitarras de Javier Patino, Juanma Torres, Jesús Torres y Juan Antonio Suárez “Cano” y la percusión de Raúl Domínguez “Botella”.
En conjunto, salvo algún pasaje que no tuvo la brillantez deseada, fue un recorrido antológico por la obra del Ballet Flamenco de Andalucía, aunque echamos de menos, entre otros números, algún momento de Bodas de sangre, esa joya de la danza que Antonio Gades dirigió en 2002 para la entonces Compañía Andaluza de Danza.
José Luis Navarro
