60 Festival del Cante de las Minas

 



La Unión acaba de celebrar su 60 Festival del Cante de las Minas. Toda una proeza. Un Festival que se devalúa día a día, porque no creo que sea fácil cometer más errores. Para empezar, el más ingenuo de los aficionados flamencos que sienten y aman el cante jondo se preguntará ¿Qué pinta  Víctor Manuel en las galas de esta edición? Que es un magnífico cantante nadie lo pone en duda, pero de flamenco tiene lo mismo que Frank Sinatra. Otro aspecto que también costaría trabajo empeorar es el trapicheo que los organizadores se montan con las pruebas selectivas de los concursantes. ¿Se podrá creer alguien que en pleno 2021 una de esas pruebas las tuviera que realizar uno de los aspirantes encima de un camión por escenario? Pues fue este año en Fabero, provincia de León. Menos mal que así y todo lo pudimos ver en las semifinales. Y qué decir del vía crucis al que se somete a los aspirantes, obligándoles a recorrer cientos de kilómetros para poder presentarse a dichas pruebas. A uno del norte le obligan a realizarlas en el sur, al del sur en el norte y al del este en el oeste peninsular. Un calvario unido a la discriminación que se hace con el que tiene la suerte de ser convocado, por ejemplo, en el madrileño Corral de la Morería, por citar un ejemplo. ¿Sadismo?, ¿Desorganización?, ¿Desidia? Y otro enredo más de difícil justificación: la dedicatoria del festival a Lituania. ¿Alguien se puede explicar por qué?

Y aún hay más. La final ha perdido todo interés, ya que se sabe de antemano quiénes serán casi todos los premiados. Este año, con una excepción, Antón Cortés, todos cuantos actuaron en la final resultaron premiados. Desde luego, en el caso de la guitarra había un solo premio, el Bordón, y un solo participante, Álvaro Pérez Álvarez. Y lo mismo en el baile. Dos Desplantes, masculino y femenino, y dos aspirantes, un bailaor y una bailaora. Una duplicidad sobre la que tenemos nuestras serias dudas, especialmente hoy cuando apenas existe diferencia en el baile de hombre y el baile de mujer, como dejó meridianamente claro la premiada Paula Rodríguez Lázaro que zapateó con tanta pasión como pudiera hacerlo el más varonil de los bailaores. Y, puestos a distinguir hombre y mujer, ¿por qué no una Lámpara femenina y otra masculina?

En lo que no hubo ningún recorte fue en la presencia sobre el escenario de un aluvión de políticos y políticas a la hora de entregar premios y diplomas. Superaron con creces el número de falangistas que con guerreras blancas, camisas azules y boinas rojas aparecían cada año para cumplir esa labor en los tiempos fundacionales del festival unionense. No parecía que hubiesen transcurrido 61 años. Eso sí, estos y estas bastante peor vestidos para la ocasión. Estos son sus cargos: Concejal de Educación y Turismo de La Unión, Concejal de Comercio y Participación Ciudadana de La Unión, Alcalde de Álora, Concejal de Medio Ambiente y Festejos de La Unión, Primer Teniente Alcalde de La Unión, Alcalde de Roche, Concejal de Deportes e Infraestructura de La Unión, Alcalde de Portman, Consejera de Educación y Cultura de Murcia, Delegado del Gobierno de la Región de Murcia, Concejal de Seguridad Ciudadana de La Unión y Alcalde de La Unión.

Y ya, cambiando de tema, citemos a los premiados. La auténtica triunfadora de este concurso ha sido la malagueña Amparo Heredia Reyes “La Repompilla”, que se alzó con la Lámpara Minera más los premios de los apartados Mineras, Cantes Bajoandaluces y Cantes de Málaga, Granada, Córdoba y Huelva. En el baile, los Desplantes correspondieron a  otro malagueño el esteponero Rafael Ramírez Vílchez y a la cántabra residente en Madrid Paula Rodríguez Lázaro. En la guitarra, el Bordón fue para el granadino Álvaro Pérez Álvarez. En otros instrumentos, el Filón se lo llevó la canadiense de origen oriental Lara Wong. También resultaron premiados la extremeña Esther Merino (Cantes Mineros) y el ursaonés Manuel Cuevas (Cantaor Joven). He aquí sus rostros:



La repompilla


Rafael Ramírez


Paula Rodríguez


Álvaro Pérez


Lara Wong


Manuel Cuevas


Esther Merino

Otros participantes que también deberían haber estado al menos en la final de baile son Beatriz Rivero ꟷla soleá que hizo en las semifinales nos pareció espléndidaꟷ y Juan Tomás de la Molía, un joven que estamos convencidos que llegará muy lejos en el mundo del baile flamenco.

Finalmente, el Jurado ha estado compuesto por Antonio Ayala “El Rampa”, Antonio Najarro, Pedro Ojesto, José Francisco Ortega y Francisco Cayuela.

                                                                                                            José Luis Navarro