Pedro el Granaíno en "Flamenco viene del Sur"

 

CANASTERA

Pedro el Granaíno

Cante: Pedro el Granaíno
Guitarra: Antonio de Patrocinio
Baile: Manuela Ríos
Bajo eléctrico: Julián Heredia
Segunda guitarra: Jesús Rodríguez
Palma y percusión: Luis Dorado, Miguel Heredia y Emilio Castañeda

Los pilares del universo sonoro de Pedro el Granaíno nos remiten a Camarón y a Enrique Morente; y los cimientos, al conocimiento y aprendizaje de los fundamentos de este arte: Tomás Pavón, Chacón, Torres, Vallejo…

La voz, el metal de Pedro el Granaíno ─una voz rota, capaz de dar varios tonos a la vez─, es sin duda una de las más interesantes del flamenco actual1. Es posible que en el recital se le rompa, que no pueda respirar bien… No importa, la verdad y la flamencura que transmite es incuestionable. A los hechos me remito.




Empezó por tonás, con la toná de origen  -como la llamaba el sabio aficionado Pierre Lefranc-; continuó con una carcelera y la debla, en la que se acordó –cómo no- de Tomás Pavón, de Triana y de su suegro el Baboso. De cierre, el “y si no es verdad…”

Soleá

Salía camaronera, con los estilos de Joaquín el de la Paula (“Quisiera volverme niño…”) y su cambio (“Mi pare me lo decía”); sigue con la soleá de Cádiz de Enrique el Mellizo  acordándose de Camarón (“Maíta de mi alma, que dime dónde estás metía”), el estilo trianero de La Andonda (“Y por el hablar de la gente, olvié yo a quien bien quería…”), el utrerano de La Serneta (“Yo nunca a la ley falté”) volviendo a la Andonda (“Si tu mal no tiene cura, ¡ay!”) y rematando por Alcalá (“Manolito el de María…”). Se acuerda de Tomás, de Fernanda y de Rancapino en algunos detalles, con aportaciones propias.

Alegrías

Por alegrías vuelve a acordarse de Camarón (“Le dicen a los de Cai, los gitanitos del Puerto...”, “de San Fernando a Caí yo voy pensando”), de Pepe de Lucía (“Pueblos de la tierra mía”) de el Águila y de Enrique Morente (“El agua no la aminoro”), de nuevo Camarón (“Que con la luz del cigarro”) (“Que estás tan descoloría”) (A los titirimundi”) y siempre presente la venerada Perla de Cádiz.

Granaínas

La interesante introducción de Antonio del Patrocinio en las granaínas le llevó a acordarse de Manuel Vallejo. ¿Es posible cantar por este palo y no rendirle un homenaje a este olvidado artista? La segunda granaína tuvo matices de D. Antonio Chacón. El remate, muy original, abandolando los fandangos de la Parrala versión Tomás Pavón (“Amapolas de un trigal”), y los de Niño Isidro y Rengel, con las aportaciones de Manuel Torres (“Olas de la mar en calma”), parecía coger de sorpresa al propio equipo.

"Canastera"

El tema que da título al espectáculo, “Canastera”, comenzó con unas interesantísimas y jondas variaciones en el bajo eléctrico de Julián Heredia en tono de rondeñas, para engarzar con este difícil compás y estilo  entre fandangos y jaleos, creado por Camarón, Paco de Lucía y casi seguro con la aportación de Paco Cepero, introduciendo Pedro algunos fandangos alosneros antiguos (“La hice pecar y pecó”). A pesar de esta dificultad, Manuela Ríos se peleó con el baile para llevarlo a su terreno con ramalazos farruqueros y muy espontáneos terminando por bulerías.

Seguiriya

Por seguiriya, Pedro empezó con la seguiriya de Manuel Molina (“Mal fin tenga este sueño”), recreándose en los tonos y ralentizándolos a la manera del maestro Rancapino, seguido del “Reniego” del trianero Tío Antonio Cagancho y terminando con el espectacular cambio de Manuel Molina. Estuvo bien acompañado por su escudero Antonio de Patrocinio, con algunas guiños de Javier Molina.

Bulería por soleá

Y Pedro se acordó del maestro, con el emotivo Réquiem (2017) de Vicente Amigo a la muerte de Paco de Lucía. Ritmo interno de una bulería por soleá.

Será la Tierra, serán los Soles, Mares y Luna quienes te añoren.
Será el flamenco quien con más fuerza te eche de menos y a ti te llore.
Será Sevilla, será Triana, será Santiago, Cai y Granada.
Serán mis sueños por siempre tuyos. Será la Tierra, seca y mojada.
Nos metío el alma en un puño.

Tangos

Se acerca en final, por tangos. Baila Manuela Ríos. Comienza con “Pistola y cuchillo”, de Humanes y Camarón. Pedro se pone morisco y Manuela baila con toda la sensualidad y garbo que tiene de herencia y de vivencia. Con “Rosa María”, seguimos con Camarón, pasamos a unas tarantas por tangos (“Se pelean en mi mente”). Se acuerda de Graná y del gran Enrique Morente (“Pa mi Manuela…”). Las guitarras homenajean a Paco. Finalizan con “el Rintintín”.

El recital terminó con un detalle de nobleza. Pedro de acordó de una gran artista que asistía como espectadora, María Vizárraga ─que, para el que no lo sepa, la noche anterior en el mismo teatro había levantado la ovación con más enjundia del espectáculo─ y la invitó a salir al escenario a cantar algo. Así lo hizo, sin micro, pero con la entrega que sólo una artista como ella es capaz. También Pedro remató con algunas letras y la compañía con algunos detalles por bulerías. Los últimos fandangos, de Antonio el de la Calzá. Sólo nos queda dar las gracias por tanta generosidad.

Y entre el público se escuchaba: ¡Dios te bendiga, Pedro!, ¡Dios te bendiga, María Vizárraga!

¡Los dioses os bendigan! Digo yo.

                                                                                            Manuel Alcántara

____________________

1. La carrera profesional de Pedro el Granaíno ─que bien podría llamarse Pedro el Sevillano, también por sus raíces─, parte de la más absoluta naturalidad. Canta porque le sale del alma y sin pretensiones de profesionalidad, y es la familia de Farruco (nada más y nada menos) quien lo descubre e insiste para que cante para ellos. Desde aquella primera época ─acompañando a La Farruca─ hemos tenido la suerte de seguirlo, siempre con enorme interés.
Por último, no quiero olvidar ─me resulta emotivo el detalle─ que fue en Sevilla, en la Peña la Solera del Ariscal de Villanueva del Ariscal en donde Pedro comenzó su carrera como cantaor “p´alante”, tras su debut en el Festival de Jerez. (Nos lo confirmó el propio artista, tras el recital, al que asistí con el buen amigo y aficionado ariscaleño Pepe el de Regina.) Eran los primeros años de la Peña, estando como presidente nuestro querido Manolo Macías. ¡Va por esta Peña y por aquellos años!